Los fibromas uterinos se clasifican según su ubicación.

útero-con-fibromasHay cuatro tipos principales de fibromas:

Fibromas subserosos

Los fibromas subserosos generalmente se desarrollan en la pared externa del útero. Este tipo de tumor fibroma puede seguir creciendo hacia afuera aumentando de tamaño. El crecimiento de un tumor fibroma subseroso ejercerá una presión adicional sobre los órganos circundantes. Por lo tanto, los síntomas de los tumores fibromas subserosos generalmente no incluyen sangrado menstrual anormal o excesivo ni interfieren con el flujo menstrual típico de una mujer. En cambio, estos tumores fibromas causan dolor y presión pélvicos. Dependiendo de la gravedad y la ubicación de los fibromas, otras complicaciones pueden acompañar a este dolor y presión.

Fibromas intramurales

Los tumores fibromas intramurales generalmente se desarrollan dentro de la pared uterina y se expanden desde allí. Estos fibromas uterinos son los más comunes. Cuando un tumor fibroma intramural se expande, tiende a hacer que el útero se sienta más grande de lo normal, lo que a veces puede confundirse con un embarazo o un aumento de peso. Este tipo de tumor fibroide también puede causar "síntomas masivos": sangrado menstrual excesivo, que puede causar ciclos menstruales prolongados y expulsión de coágulos, y dolor pélvico causado por la presión adicional ejercida sobre los órganos circundantes por el crecimiento del fibroma, que en consecuencia puede causar micción frecuente y presión.

Fibromas Submucosos

Los menos comunes de los diversos tipos de tumores fibromas son los fibromas submucosos. Estos fibromas se desarrollan justo debajo del revestimiento de la cavidad uterina. Los tumores fibromas submucosos grandes pueden aumentar el tamaño de la cavidad del útero y pueden bloquear las trompas de Falopio, lo que puede causar complicaciones con la fertilidad. Algunos tumores fibromas no producen ningún síntoma, mientras que otros pueden ser muy sintomáticos.

Los síntomas asociados con los fibromas submucosos incluyen sangrado menstrual excesivo y muy abundante y menstruación prolongada. Estos síntomas también pueden provocar la formación de coágulos y ensuciamiento frecuente, lo que puede afectar su estilo de vida cotidiano. El sangrado no tratado, prolongado o excesivo puede causar problemas más complicados, como anemia y/o fatiga, lo que podría conducir a una necesidad futura de transfusiones de sangre.

Fibromas pedunculados

Los fibromas uterinos pediculados ocurren cuando un tumor fibroide crece en un tallo, lo que da como resultado fibromas submucosos o subserosos pediculados. Estos fibromas pueden crecer dentro del útero y también pueden crecer en el exterior de la pared uterina. Los síntomas asociados con los tumores fibromas pediculados incluyen dolor y presión, ya que los fibromas a veces pueden torcerse en el tallo.

Una mujer puede tener uno o todos estos tipos de fibromas. Es común que una mujer tenga múltiples tumores fibromas y puede resultar difícil entender qué fibroma está causando los síntomas. Debido a que los tumores fibromas pueden ser múltiples y extenderse dentro del útero, generalmente hay más fibromas presentes de los que pueden detectarse debido a su pequeño tamaño. Incluso una mujer que tiene un solo fibroma visible debe considerar que puede haber múltiples fibromas uterinos cuando se habla de terapia. Los fibromas uterinos también pueden denominarse mioma, leiomioma, leiomioma y fibromioma.