Los fibromas uterinos, también conocidos como leiomiomas o miomas, son tumores benignos (no cancerosos) que crecen sobre o dentro del tejido muscular del útero.
Algunos de los síntomas más comunes de los fibromas uterinos incluyen sangrado menstrual abundante y excesivo, dolor y presión pélvicos e incontinencia y frecuencia urinaria. Si estas experimentando signos y síntomas de tumores fibromas uterinos, es posible que le resulte difícil realizar sus actividades diarias y mantener su forma de vida.
Hay diferentes tipos de fibromas y el tamaño puede variar desde muy pequeño (tamaño de una nuez) hasta tan grande como un melón o incluso más grande. Es común que una mujer tenga múltiples tumores fibromas y puede resultar difícil entender qué fibroma está causando los síntomas.
Aproximadamente entre el 20 y el 40% de las mujeres de 35 años o más tienen tumores fibromas. Los fibromas son más comunes entre mujeres de ascendencia afroamericana. Algunas estadísticas indican que hasta el 80% de las mujeres afroamericanas desarrollarán fibromas uterinos. Descubre si estás en riesgo de fibromas uterinos.
Si tienes fibromas tienes opciones. Si bien algunas mujeres no experimentan ninguno de los síntomas de los fibromas, la ubicación y el tamaño de los tumores fibromas pueden causar síntomas que pueden afectar la calidad de vida de una mujer. Échale un vistazo al Opciones de tratamiento para todos.
Los fibromas son sensibles a las hormonas, por lo que es probable que los síntomas sean cíclicos, como la menstruación. Como los niveles de estrógeno tienden a aumentar antes del inicio de la menopausia, esto puede hacer que el tamaño de muchos fibromas uterinos aumente junto con los síntomas. Durante la menopausia, los niveles de estrógeno disminuyen drásticamente, lo que hace que los fibromas se reduzcan. Sin embargo, es posible que las mujeres que toman terapia de reemplazo hormonal (TRH) durante la menopausia no experimenten ningún alivio de los síntomas porque el estrógeno contenido en este régimen puede hacer que los tumores fibromas se agranden y los síntomas regresen.
